miércoles, 22 de septiembre de 2010

En un marchito y desordenado jardìn

En un jardìn 
donde las flores terminaron boca abajo
pero no llegaron a perder su belleza
sus colores se multiplicaban
al contraste de su entorno
*
ella
y su  misteriosa locura, que apenas se notaba al saludar

se acerco con una sonrisa
encontrando un lugar a mi lado

sentados en una banca
al borde de un àrbol seco
aùn con hojas que absorvìan el sol

escondidos entre sus suaves sombras
conversamos otra vez
*
- eres  mujer
y la sociedad es hambrienta

estàs dentro con tan sòlo deslumbrar a alguien
con esos verdes y detallados ojos

deja que se pierdan en ellos, por los ùltimos recordados y selectos segundos
y no te esfuerces por salir y perderlo todo -
*
brotaban ya las persepciones silenciosas
al  dejar caer el sol

como haciendo un camino con la sutileza del tacto
nos dimos un adelantado y ùltimo beso,
un ùltimo quizàs, no lo sè.

el "jamàs" suele perder su seriedad con el tiempo
y se vuelve una sentencia còmica
*
habrà que esperar, en que marchito jardìn nos volveremos a encontrar
y volver a decir, hasta nunca otra vez .

No hay comentarios:

Publicar un comentario